domingo, 5 de julio de 2015

Tu relación es problemática... y los libros de romance de oficina

Siempre lo vemos en esos libros de romance... el hombre misterioso, millonario y un poco grosero que recibe a la secretaria torpe y terminan enamorándose y comiendo langosta (¿perdices?) felices en la recepción de la boda.

A todas nos gustan esas historias ¿o no?, al menos en algún nivel nos interesan. La mayoría de nosotros no tenemos millones que derrochar y a veces soñamos con ese romance que nos puede hacer la vida más fácil (yo admito ser una mala feminista y bromear con que me voy a casar con un jefe millonario).


Pero nunca me había fijado qué tan problemáticas son esas relaciones hasta que vi una en la vida real.

En la empresa en la que estoy  (llena de jovenes y con un ambiente amigable) hay 4 chicas de mi universidad que están haciendo su servicio social (tienen entre 19 y 21 años) y desde el principio había visto un tipo de juegos con algunos tranbajadores que no me parecían adecuados. Pero no lo vi taaaaaan mal. Pensé que tenía que ver con que soy muy introvertida y a mi ese tipo de jugueteos (donde se corretean por cosas y así) me ponen bastante incómoda. Ellos eran simplemente más desenfadados.

Después de un par de meses una chica dejó de ir, y como yo estoy en otra oficina, no me fijé al principio. Las demás seguían allí y entraron al mismo tiempo por lo que estaba segura que todavía tenía horas que cubrir. Poco después empecé a escuchar rumores de que salía con mi jefe casado. Y después de que los vi juntos mis dudas se aclararon.

No puedo hacer nada.

No es mi lugar decidir si o con quién engañan a alguien y no creo que sea conveniente ir corriendo a la esposa (que no conozco), porque quizá ella esté enterada del asunto. Y no le importe. No sé. No es mi lugar decir o hacer nada. Ella no es una menor de edad y el no es un cincuentón (apenas llega a los 30); pueden tomar sus propias decisiones. Ella tiene la  fama (chismes horribles, lo sé) de salir con los chicos por las cosas que le pueden comprar y estoy segura de que por lo menos ya no va a tener que cubrir las horas que tenía. Y mi jefe tiene el poder de darle lo que quiere.

Pero eso no quiere decir que al enterarme no sentí que estuviera mal. 

Y me di cuenta que ese es el principal problema que me impide leer libros de romance que traten de una relación de una empleada con un jefe. Y casi después de leer la sinopsis decido no leer el libro. Porque puede ser bastante problemático estar con alguien que tiene más poder que tú y que puede afectar de tu vida en algún sentido (laboral, o de otra forma).

No he leído esta novela, es solo la portada que salió primero 

Puede que haya amor en esa relación, pero no creo que vaya más allá de la pasión o el interés que puedan sentir por el otro. Y eso no está mal per se. No tienes que estar enamorado para salir con alguien (existen los frees) pero aún así no me siento bien con ello. No es algo que vaya a celebrar con champaña y flores.

Pensar en este tema hace que me duela la cabeza porque nunca sabemos donde están los límites (y puede que nunca lo sepamos): de mi como metomentodo y de hasta donde está mal salir con el jefe. No digo que las novelas de romance en la oficina sean una abominación y menos que las personas que los leen sean horribles. Claro que no. Para nada. Pero si creo que debemos empezar a mostrar modelos más saludables de relaciones en las novelas rosas, para que yo de vez en cuando deje de pensar en casarme con un millonario por su dinero y las chicas la piensen más antes de entrar en situaciones como estas.